La cantante colombiana Shakira fue una entregada seguidora más del partido de anoche.
La joven con el movimiento de caderas más espectacular del panoránama musical, sintió el partido y se desvivió al 100%, esperando la victoria del equipo de su novio Gerard Piqué, pero el resultado fue otro.
Tras el encuentro, más que el Waka Waka, la cantante, le debió cantar La Tortura.
No creo que a Piqué le consolase demasiado el abrazo de su amada, pues no fue un beso de celebración, sino más bien de pésame.
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